Julio Pérez, presidente de la sectorial de jardinería de Asfplant: «Los jardineros sentimos que debemos salir a la calle a reivindicarnos».
Aunque no somos de los sectores más afectados ante la situación actual del COVID19, los jardineros sentimos que debemos salir a la calle y reivindicar los males de los que adolecemos.
A ver si es posible que alguien nos escuche de una vez por todas, no solo por los efectos de la pandemia sino por otros temas trascendentes como son pedir una Reforma Fiscal que beneficie el sector servicios, el Convenio Estatal de Jardinería que va a renovarse, Ayudas, la Ley de Contratación Pública, la Reforma Laboral que se está cociendo en estos momentos, el Intrusismo, la falta de información y dificultad al acceso de los Fondos europeos y ayudas estatales, etc.
Todos estos inconvenientes acompañados de la crisis sanitaria y económica existente va a desencadenar futuros cierres de empresas destinadas al verde con el consiguiente despido de un gran número de trabajadores.
REFORMAS FISCALES para ayudar a recuperar el sector y tratar de evitar la economía sumergida. Proponemos bajada del IVA al 10% o incluso al 4% si fuera posible, y que el contribuyente pueda desgravarse en su declaración del IRPF los trabajos de jardinería y limpieza, y así evitar la negativa continua del tan conocido dicho: «NO QUIERO FACTURA».
Con estas propuestas se reduciría gran parte de la economía sumergida existente, aumentarían los ingresos por parte de Hacienda Pública con el consiguiente retorno. En otros países ha funcionado bien pero parece que aquí no hay demasiado interés en que esto ocurra.
CONVENIO ESTATAL. Las empresas de jardinería privadas no nos sentimos identificados con el presente convenio. Es un convenio hecho para las grandes empresas de servicios. A las empresas que trabajan para la administración y participan en licitaciones públicas les interesa.
Incluso muchas de las retribuciones extras, complementos y permisos tratan a los trabajadores como si de funcionarios se tratara. Y el ejemplo, es que los trabajadores siempre mantendrán el puesto de trabajo aunque cambie la empresa concesionaria (que me parece muy loable).
En la empresa privada ni somos funcionarios ni podemos aplicar estas medidas. Además, un gran porcentaje de las empresas de jardinería que atienden el sector privado tienen menos de 10 trabajadores y por tanto, muy poca repercusión en las mesas de negociación del convenio. Nuestra posibilidad de poder influir o participar en la toma de decisiones es nula. Por ello pedimos SALIR DEL CONVENIO o la posibilidad de crear uno específico para las empresas del sector privado y más pequeñas.
AYUDAS. Europeas que se quedan por el camino y que no llegan.
– DIRECTAS: Aquí quizás deberíamos ser un poco auto-críticos y dedicar más tiempo a ello las empresas o bien, que las Asociaciones o Federaciones pudieran echar una mano al respecto.
– INDIRECTAS: que el gobierno, incluso fondos europeos puedan llegar a las administraciones locales para que inviertan en verde.
LICITACIONES PÚBLICAS que tengan que ver con la jardinería. Se las llevan las empresas constructoras grandes ya que tienen todas las clasificaciones habidas y por haber. Una buena opción para que podamos optar y realizar bien nuestro trabajo sería que la actividad principal de la empresa fuera la jardinería o que el 80% del volumen facturado tuviera que ver con el verde y no con el ladrillo.
INTRUSISMO. Necesitamos que la gente denuncie y que además haya mayor número de inspecciones de trabajo. Para ello pensamos que se necesitan más inspectores. La gente no va a denunciar si saca beneficio económico de trabajar con empresas sumergidas que no declaran ni impuestos ni dan de alta a sus trabajadores como es debido y por tanto no les hacen factura con IVA. Este comentario se concatena con la comentada posible reforma fiscal.
SUBSIDIO O SALARIO MÍNIMO VITAL. Para colmo nos informan que a las personas que reciban el subsidio deberán realizar trabajos de limpieza viaria y «de jardinería» para que haya retorno de la prestación. Pensamos que subestima nuestro sector y denigra la profesionalidad de los jardineros. La gente ha de estar formada y preparada y lo del que EL QUE VALE, VALE. Y EL QUE NO, PARA JARDINERO debería pasar a la historia. Existen otros caminos y trabajos que puedan hacer seguro la gente que cobre el subsidio.
- 10 septiembre 2020